Paro parcial de colectivos: el reclamo por el pago de subsidios ya se hace sentir en el AMBA
Las frecuencias de los servicios están reducidas a la mitad hasta nuevo aviso. La medida es por el "atraso verificado en la acreditación de los fondos de las compensaciones tarifarias".
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Desde este martes a lass 0 horas, y por tiempo indeterminado, los servicios de colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se encuentran reducidos a la mitad de su frecuencia habitual en reclamo al atraso en el pago de los subsidios a las tarifas.
Al respecto, la Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP) señaló que hay un desfasaje de un mes lo que implica cerca de unos 18 mil millones de pesos para el conjunto de las 170 empresas que prestan servicios en la región metropolitana a través de unas 300 líneas de colectivos.
“Las entidades empresarias de transporte público de pasajeros por automotor alertan a la población ante el considerable atraso verificado en la acreditación de los fondos de las compensaciones tarifarias correspondientes a los mayores costos incurridos durante el año en curso”, manifestaron en un comunicado.
Las entidades que firmaron el comunicado son: Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP), Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (CETUBA), Cámara del Transporte de la Provincia de Buenos Aires (CTCBA).
En tanto, la semana pasada, el Gobierno bonaerense aprobó la adenda de un convenio con Nación para recibir el desembolso de fondos millonarios para el transporte público automotor. De esta manera, se oficializó que recepcionará un total de 10.500 millones de pesos por los meses de abril, mayo y junio.
En el Área Metropolitana de Buenos Aires, el servicio de colectivos se mantiene dentro de la órbita del Estado Nacional, que es el que lo regula, fija los niveles tarifarios y desde mediados de 2012 cuenta con un subsidio variable. Los colectivos que transitan, tanto dentro de Capital Federal como entre CABA y la provincia de Buenos Aires, son de jurisdicción nacional y cuentan con un boleto mínimo de $18, costo significativamente menor al de otras ciudades del país.
Según pudo saber La Tecla de fuentes oficiales, el año pasado, la Administración Nacional destinó $15.000 millones en subsidios a estas líneas. El número que se estipula para 2022 es un piso de $20,7 mil millones a valores de hoy, entre compensaciones y subsidios al gasoil. A eso se le podrían sumar unos $3.300 millones a modo de aporte extra, teniendo en cuenta dos posibles actualizaciones de costos en el año, pero sin considerar aumentos de tarifas.
Ahora bien, este mismo escenario se traduce puertas adentro de la provincia de Buenos Aires que, en sí misma, funciona y tiene características similares a un país. Mientras las demás provincias se quejan por el trato diferencial que reciben con respecto al AMBA, en territorio bonaerense son los municipios del interior los que se quejan del Gran Buenos Aires.
Bahía Blanca, Azul, Mar del Plata, Olavarría y otros municipios abonan hasta tres veces más que el boleto en la zona ambeña ¿Por qué? Básicamente, por la naturaleza de la región. Como se sabe, el AMBA funciona como un gran conglomerado en el que la Capital Federal y otros 40 municipios no distinguen fronteras. Uno está pegado al otro. Entonces, la tarifa es única porque la realidad es distinta a la del interior y porque, además, es uno de los lugares más humildes del país.
Asimismo, el AMBA cuenta con red SUBE, una herramienta que le permite al Estado calcular de manera exacta la recaudación y, con ello, el faltante que se necesita compensar. Por ejemplo, si el transporte del AMBA cuesta 100 millones de pesos, pero sólo recaudó 10 millones, el Estado tiene que poner los 90 millones que faltan. En el caso de CABA, los 90 millones los pone Nación, en su mayoría (entre el 60 y 70%), mientras que en el caso de la Provincia, los pone el Estado bonaerense.
Esto no siempre fue así. La transferencia de los subsidios al transporte de Nación a Provincia se acordó entre María Eugenia Vidal y Mauricio Macri en medio de la negociación por la actualización del Fondo del Conurbano.
A comienzos de 2020, tal como publicó este medio en su momento, la idea de Axel Kicillof era volver a pasar los subsidios a la órbita nacional. Devolverlos. Ahora, la dirección es contraria porque si el Gobierno nacional le pide a la Ciudad hacerse cargo de lo suyo, el reclamo de la Provincia ya no tiene lugar. Las asimetrías, sin embargo, son notables. Mientras Capital pagaría $13 mil millones; la Provincia seguirá aportando $110 mil millones, siempre y cuando se mantenga la tarifa. Si se modifica el valor del boleto, el panorama cambia.