La Tecla
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Luego de semanas donde las presiones llegaron por todos lados, el Gobierno nacional confirmó el desembarco de la Planta de Gas Natural Licuado en tierras patagónicas y deja a la provincia de Buenos Aires sin una inversión multimillonaria. Finalmente, el mano a mano tuvo un vencedor y se trata Alberto Weretilneck, gobernador de Río Negro.
De esta manera, la planta conjunta de GNL entre YPF y la estatal malaya Petronas, por unos US$ 30.000 millones, estará ubicada en la zona de Punta Colorada, en la localidad rionegrina de Sierra Grande, donde también se llevará a cabo la puesta en valor y modernización de un viejo puerto en desuso con salida al océano Atlántico.
Según trascendió, la decisión fue tomada por las empresas teniendo en cuenta que, mientras Río Negro ya adhirió al régimen de grandes inversiones RIGI, la provincia de Buenos Aires aún está definiendo qué camino tomar.
Todo indica que la adhesión al RIGI por parte de Río Negro fue el detonante de la decisión tomada esta tarde por del directorio de YPF, que por unanimidad eligió a la provincia Patagonia por sobre Buenos Aires.
En línea con lo sostenido por el presidente Javier Milei en el programa de Guillermo Fantino que había asegurado que si el gobernador bonaerense “hubiera querido hacer las cosas bien, se hubiera adherido al RIGI nacional”.
Por su parte, desde el Ejecutivo provincial sostienen que desde nación nunca les comunicaron nada respecto a esta decisión y tildaron la decisión de “improvisada”.