25 de noviembre de 2025
ARENA LIBRE DE COLILLAS
Arrancan las multas en las playas marplatenses: fumar fuera de las áreas permitidas tendrá castigo
Desde diciembre, quienes fumen fuera de los sectores habilitados en balnearios y concesiones enfrentarán multas. Con montos que van de $50.899 a $508.992, el Municipio inicia la etapa más estricta del plan de playas libres de humo.

A partir de diciembre, el descanso en la costa marplatense vendrá con una advertencia clara: encender un cigarrillo fuera de las zonas autorizadas podrá costar varios cientos de miles de pesos. Tras tres años de transición, la ciudad dejará atrás la etapa de campañas y cartelería para ingresar de lleno en un esquema de sanciones económicas en balnearios privados, concesiones municipales, Unidades Turísticas Fiscales y el complejo Punta Mogotes.
La medida forma parte del plan oficial para consolidar playas libres de humo, una política que se terminó de estructurar con dos ordenanzas que obligaron a los balnearios a señalizar sectores para fumadores, delimitar áreas libres de tabaco y colocar recipientes para desechar colillas. Esa primera fase ya está cumplida; lo que faltaba era el paso más sensible: el de las multas.
Cuánto costará romper la norma
El sistema sancionatorio establece penalidades que van del 0,15% al 1,5% del equivalente a 100 salarios mínimos municipales. Si se toma como referencia el salario municipal de 18 horas de septiembre ($339.328,21), los montos quedarían dentro de una franja que va desde $50.899 hasta $508.992.
Además, el Ejecutivo local tiene la potestad de extender la prohibición a todas las playas públicas, aunque por ahora no avanzó en esa dirección.
Un operativo todavía en construcción
Aunque la definición política ya está tomada, aún persisten interrogantes sobre el modo en que se controlará la nueva normativa. El Municipio no precisó si enviará inspectores propios, si habilitará un canal de denuncias o si los concesionarios deberán intervenir ante una infracción. También resta aclarar cómo se cobrará la multa a turistas sin domicilio en el partido.
Mientras tanto, la costa ya exhibe la señalización obligatoria que separa los sectores libres de humo de las áreas donde se permite fumar. Esa cartelería será la referencia base para los controles de verano.
Por qué se avanza ahora
El endurecimiento del esquema no responde solo a criterios sanitarios: las colillas son el residuo más frecuente en las playas bonaerenses y constituyen una de las principales fuentes de contaminación costera. Distintos estudios científicos han señalado que un solo filtro puede afectar grandes volúmenes de agua y tardar más de un año en degradarse.
Con la llegada de la temporada alta, el desafío será doble: aplicar sanciones sin tensar la convivencia en la playa y sostener una política que busca impactar tanto en la salud como en el ambiente.