Wanda llegó temprano por la mañana, pasadas las 7:30, acompañada por su pareja Martín Migueles y su abogado Diego Palombo. Vestida con una campera de cuero negra y cartera a tono, con el cabello suelto, esperó en la vereda junto a ellos, tomó mates hasta la apertura de la fiscalía. Además, evitó hacer declaraciones a la prensa y mantuvo silencio ante las preguntas de los medios.
La declaración se llevó a cabo ante el fiscal Cosme Iribarren. La causa involucra acciones fraudulentas que impactan en figuras del espectáculo y genera expectativa en el entorno de la rubia debilidad.
Asimismo, ahora se prepara para disfrutar de sus vacaciones y luego grabará una ficción vertical con Maxi Lopez.