13 de abril de 2010
FONDOS TURBIOS
Los negocios de Bruera
Un proveedor de La Plata cuenta el mecanismo de contrataciones del municipio. Narra, con lujo de detalles, cómo operan los Bruera, sus recaudadores y su jefe de compras. Se siente estafado. Reclama una deuda superior al millón de pesos. “Bracco (hoy preso por estafa) les hizo ganar mucha plata”, asegura Juan Carlos Breglia
Hernán Alfredo Bracco se presentó ante Desafío Económico como “el recaudador” de los Bruera. Reveló, por primera vez en público, cómo opera el intendente de La Plata y uno de sus hermanos, cómo hace para juntar dinero, para armar licitaciones, para cambiar cheques, cobrar presuntos sobresueldos o convencer a proveedores. Hoy, Bracco está preso por estafa.
Juan Carlos Breglia es uno de esos “proveedores”, primero “convencido” y luego “estafado”. También se presentó a Desafío con una voluminosa carpeta de papeles, denuncias, presentaciones ante el Municipio de La Plata, ante el Tribunal de Cuentas y la Justicia Civil. Breglia es presidente de Pinturería Direcco SA. Según dice, comenzó a trabajar para el Municipio en un abrir y cerrar de ojos, sin ningún tipo de contratación previa, orden de pago ni presupuesto oficial. Hoy, asegura, le deben alrededor de $ 1.500.000. Así consta en la carta documento fechada 20 de abril de 2009.
-¿Cómo es su nombre?
-Juan Carlos Breglia. Tengo 47 años. Toda mi vida me dediqué a la construcción. También al comercio. Siempre hice lo mismo.
-¿Cómo comenzó a trabajar con el Municipio?
-En el tiempo de Alak hice algunos trabajos, con provisión de pintura. Cobra-mos todo. Te hacían una orden de compra, factura, remito; entrega de merca-dería y en un tiempo prudencial cobrábamos.
-¿Y con Bruera?
-Llegué a través de Sergio, un amigo mío proveedor de carne. Fue en 2008.
El me acercó a un tal Bracco, que estaba buscando pintura, materiales y cosas pa-ra producción.
-¿Hernán Alfredo Bracco?
-Exacto.
-¿Cómo fue su primer encuentro?
-Nos citó en Malvinas porque tenía un trabajo urgente. Nunca antes lo había visto. Me dijo que debía hacer una obra integral, desde veredas hasta cañerías.
-¿El cómo se presentó?
-Como el tercero en línea de la Municipalidad. El me dijo: “Primero está Pablo Bruera, segundo Mariano y después yo”. Me dijo que es un representante directo de la Municipalidad.
-¿Qué le ofreció?
-Me pidió que ese mismo día empezara a trabajar en Malvinas, desde las veredas hasta el restorán adentro: desagües, instalación eléctrica, luces…
-¿Cotizó, presentó algún presupuesto, algún papel?
-No, nada. A los pocos días le pasé el monto por el total de la obra. Estuvimos unos tres meses trabajando día y noche, entre ocho y quince personas.
-¿Cuánto presupuestó la obra?
-Ciento noventa y ocho mil pesos en el interior y doscientos cincuenta mil en el exterior
-¿En esos tres meses, qué cobró?
-Bracco me decía que los papeles los manejaba él. Pero no me dio nada. Me decía que ciertos trámites los manejaba de forma distinta, porque el intendente quería terminar la obra en tiempo récord. Nunca cobré nada.
-¿Al cabo de esa obra, siguió relacionándose con Bracco?
-Seguí. Mi idea “era jugar en Primera”, como me decían ellos. Por eso seguí trabajando. Me hicieron hacer un proyecto para 12 y 72, la estación Circunvalación. Me vino a ver Leonardo Salomone, el encargado de compras. Vino junto a Bracco, mandado por Mariano Bruera. Me pidieron un proyecto para hacer algo similar, aunque más grande que en Malvinas. Hicimos todo el proyecto, y el presupuesto, superior a tres millones de pesos. Era algo estimado, dada la desprolijidad con la que se manejaban.
-¿Bracco y Salomone se conocían?
-Sí, de hecho Salomone hacía a pie juntillas lo que le decía Bracco.
-¿Mariano y Bracco se conocían?
-Sí, estaban todo el día juntos.
-¿Con Circunvalación no se llegó a hacer nada?
-No. Me llamaron para hacer algo en el parque Ecológico. Me citó Salomone a la oficina de Compras de la Municipalidad.
-¿Mariano hablaba con usted?
-Sí, por radio. Pablo (Bruera) una vez nos llamó para felicitarnos por la obra de Malvinas.
-¿También trabajó en la época de las inundaciones del 28 de febrero de 2008?
-Me pidieron casillas. Por ejemplo, para una mujer de Los Hornos. El intenden-te le había prometido una casilla, y Bracco me llamó a para conseguir una. La conseguí, con un amigo que vende casillas.
-¿Por qué seguía trabajando si no le pagaban?
-Porque estaba totalmente convencido de que me iban a pagar. Si no le puedo dar crédito al intendente de mi ciudad, no le puedo dar crédito a nadie. Bracco llevaba al intendente en su camioneta, en una BMW X5. Y también en un Megane edición especial. Bracco manejaba.
-¿En las inundaciones qué más hizo?
-Había hecho un pago anticipado de miles de chapas. Y las fui entregando, en el Mercado, donde se concentraba la ayuda social. También en la República de los Niños.
-¿Alguien las contaba?
-Sí, Bracco y punteros.
-¿Le dieron algún remito?
-No. Cuando pedía los papeles, Bracco me decía que “ahora es imposible”. Que después lo íbamos a resolver, que me iba a dar todas las órdenes de compra. Nun-ca lo hizo.
-Es decir, tuvo una relación fluida.
-Todas las semanas me reunía en el Palacio Municipal. Con Salomone y Bracco. Después, cuando Bracco se fue, llegó un tal Diego Drysdale para ocupar su lugar. A Bracco lo conocía todo el mundo (en la oficina de Compras).
-¿Se manejaba con confianza?
-Sí, todos le obedecían. Hacía firmar papeles. Con Mariano Bruera se veían todos los días. También en una casa cercana al hospital de Gonnet.
-¿Conocía antes a Pablo Bruera?
-Sí, había venido a mi negocio.
-¿Nunca le reclamó la deuda?
-Sí. Lo vi dos veces. Me dijo que se iba a encargar del tema. Hasta le mandé una carta documento. Me derivó con su abogado, Tito Bárcena, que atiende en una de las Torres. El me dijo que sabía que mi caso no era humo, sino cierto. Con alguna desprolijidad, pero cierto, fehaciente. Eso me dijo.
-¿Le ofrecieron algún mecanismo de pago?
-Sí, me dijo que iba a hacer las órdenes de compra con todo lo que yo pudiera probar. Le pregunté si esto lo habían hecho otras veces, y él me respondió que sí. Me pidió tiempo. Me dijo que Mariano y el contador Yalet estaban al tanto del tiempo. Pero todo se postergó mucho.
-¿Tiene esperanzas de qué esto se resuelva?
-Mientras ellos estén en el poder, lo dudo. Los comentarios que dice Mariano Bruera sobre que “tenemos todos los fiscales, todos los jueces”, son ciertos.
-¿De qué manera se manejan?
-Todo para ahora. Son muy soberbios. Mariano maltrata a la gente.
-¿Cree que es el único perjudicado por esta situación?
-Tengo conocidos que, entiendo, están en la misma situación.
-¿Con Bracco en prisión, toda esta estructura se derrumbó?
-A mí me citó Diego, junto con Salomo-ne. Textualmente me dijo que ocupaba el lugar de Bracco, que él no era político, no tenía ningún cargo en la Municipalidad, sino que manejaba todo el dinero. Es el recaudador. Me reuní con él en Willkeny (un restobar de La Plata). Me contó cómo era el mecanismo: “De lo que vos cobres, un 20 por ciento lo vas a tener que dejar, un 10 por ciento para el intendente, para la Corona , y el otro 10 por ciento para mí”.
-¿Para Diego?
-Sí, para él.
-Bracco está preso, ¿se sorprendió por esto? (la nota se hizo el 10/03)
-No. Entiendo también que Bracco les hizo ganar mucha plata a ellos. Este otro señor, Diego, es más prolijo (…). Cualquier juez o fiscal que quiere saber algo de esto puede pedir los informes de los llamados por teléfono. Decían todo por teléfono, por radio. Si hay dudas de lo que yo digo, se podría pedir informes por ahí.
-En algunos puntos su relato es
coincidente con el de Bracco.
-Sí, yo leí la nota de Bracco de ustedes, en Desafío. Palabras más, palabras menos, todo lo que cuenta fue así. El testimonio es cierto.