4 de agosto de 2011
ESTRUCTURA TRANSVERSAL
El mapa territorial del sabbatellismo
Martín Sabbatella anotó 73 candidatos a intendente en la Provincia, en adhesión a Cristina K. El armado centrado en Nuevo Encuentro, el enojo de muchos intendentes y la participación del kirchnerismo duro en algunas comunas
Tras obtener el aval kirchnerista para adherir su boleta a la de Cristina K, el diputado nacional Martín Sabbatella comenzó a montar la estructura territorial en la Provincia. Sin poder armar lista propia de diputados nacionales, el candidato a Gobernador por Nuevo Encuentro decidió marcar la cancha en territorio bonaerense y nominar la mayor cantidad de postulantes municipales. Logró ubicar candidatos en 73 municipios, pero la tarea fue ardua, y desgastante, al punto que en el camino quedaron algunos aliados y simpatizantes.
Un caso fue el de los intendentes que participan de la Corriente Nacional de la Militancia. Mario Secco, de Ensenada; Francisco Gutiérrez, de Quilmes; Gustavo Arrieta, de Cañuelas; y Darío Díaz Pérez, de Lanús, fueron algunos de los que buscaron que Sabbatella se integrara a su jugada reeleccionista. Pero el hombre de Morón prefirió poner candidato propio. Por ello, los posibles aliados se transformaron en contrincantes.
“Nosotros militamos la lista de adhesión, lo convocamos a nuestro municipio, le hicimos la segunda para conformar un espacio transversal común, y a cambio se encerró en su partido”, indica un operador del sector de la Corriente.
También la agrupación de Libres del Sur, regenteada por Jorge Ceballos, decidió tomar otro camino, tras varios amagos de unidad. El caso emblemático se dio en Lomas de Zamora, donde la tan fogoneada candidatura de la ex diputada provincial Laura Berardo (Libres del Sur) quedó trunca tras la separación.
Finalmente fueron el sabbatellismo, a través del EDE, y Partido Solidario (PSOL), de Carlos Heller, los que mayor peso tuvieron en el reparto. Nuevo Encuentro está conformado, además, por el socialismo K, el SI de Carlos Raimundi y una porción de la CTA, ubicada tras la figura de Hugo Yasky. En el Conurbano, territorio donde hubo la mayor cantidad de postulantes, los encargados del armado fueron: Adrián Grana, ex titular del HCD de Morón y hombre de absoluta confianza de Sabbatella (al punto que iniciaron su militancia juntos en la Federación de Estudiantes Secundarios de Morón); Daniel Ravetino, a quien conoce de Encuentro Popular (de Adolfo Rodil) y es candidato a senador por la Segunda; y Eduardo Pereyra, gremialista del Suteba que encabeza la nómina de la Tercera sección. Hubo candidatos puros de Nuevo Encuentro, dirigentes provenientes del PJ y algunos enganchados por sectores K, como el caso del funcionario de cancillería Oscar Laborde, ex intendente de Avellaneda, que sirvió como puente para ubicar algunos nominados. También tuvieron su cuota los jovenes de La Cámpora, que avalaron al candidato de San Vicente, Alejandro Valle. Aseguran que se buscó menguar la reelección del jefe comunal, Antonio Di Sabbatino, quien generó antipatías en las huestes ultra K.
NE acordó, además, con cinco partidos vecinales, ubicados en su mayoría en el interior. Aunque no se ilusionan con sumar una nueva intendencia, más allá de conservar la comuna de Morón, los sabbatellistas confían en iniciar un proceso de instalación bonaerense.
Ser la “pata progresista” del kirchnerismo en Buenos Aires es la apuesta. La elección mostrará cuánto tiempo puede llevarle la empresa, y si es viable.
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