16 de septiembre de 2012
CAMBIOS
Romero le dice no a la Policía Comunal
"Lo que tiene que haber es un compromiso y una intervención más directos de los intendentes como comandantes políticos, y que no haya un superministro, estilo faraón, comandando la dirección de la Policía, que parece más un ejército, por la cantidad de hombres que tiene”, remarca
“No puede haber en la Provincia ciento treinta y cinco policías”, afirma Marcelo Romero, fiscal de la UFI Nº 6 de La Plata, con cierta ironía, sobre los proyectos de ley de creación de policías comunales o municipales (de acuerdo a la propuesta) que hablan de descentralizar hacia los municipios las fuerzas de seguridad.
“Lo que tiene que haber es un compromiso y una intervención más directos de los intendentes como comandantes políticos, y que no haya un superministro, estilo faraón, comandando la dirección de la Policía, que parece más un ejército, por la cantidad de hombres que tiene”, remarca.
-Entonces, no concuerda con los proyectos de Policía Comunal.
-No, creo que tiene que haber una sola Policía, y una descentralización del comando político.
-¿No habría que hacer cambios?
-Sí, pero de otro tipo. Hay que involucrar a los intendentes en el armado de políticas criminales de acuerdo a su reino, porque no es lo mismo la Policía de Lanús que la de Punta Indio; son realidades territoriales diferentes. La intendencia tiene que estar comprometida y dar una respuesta política; ahora, los fondos tienen que ser de la Provincia, y el comandante tiene que ser el Gobernador. En lo que estoy de acuerdo es en que haya una descentralización del comando político, y que los intendentes estén comprometidos y puedan dar respuestas a la gente, porque si no, daría la impresión de que se lavaran las manos.
-Ellos dicen que no tienen suficientes herramientas, que no deciden nada…
-Pero bajo cuerda inciden en la designación de jefes departamentales, de comisarios y demás; no es que están completamente al margen. Para designar un comisario en una jurisdicción, el intendente está enterado, propone y promueve; que no se hagan los desentendidos y digan que no tienen nada que ver con la Policía. Lo que sí es cierto es que no disponen de fondos necesarios para abordar el tema en toda su dimensión.
-¿Qué opina de las leyes de Justicia que se impulsan en el Senado?
-No conozco los proyectos sino por la divulgación periodística. Siempre es bueno que se hagan ajustes, tanto en mecanismos como en instituciones, siempre que se advierta que no está funcionando correctamente. Pero creo que, más allá de esto, se impone una reforma integral del sistema judicial, y no tanto parches. Por ejemplo, en el Código Penal de la Nación se propician reformas que aumentan las penas de forma inorgánica a determinados delitos; por ejemplo, cuando hay tres o cuatro accidentes automovilísticos, las ONGs de víctimas de hechos de tránsito piden aumentos, o que no se excarcele, y después resulta que esas mismas penas son más graves que los delitos dolosos; ése es el peligro de las reformas inorgánicas. Lo mismo sucede con algunas propuestas de Scioli. El Gobernador presenta un proyecto en el que se restringen las excarcelaciones; y éste es un parche clásico. Cuando suben los índices delictivos o se cometen hechos que conmueven a la comunidad, se endurecen las penas de excarcelaciones, y cuando las cárceles explotan porque no hay más lugar, los largan; es un péndulo que va de extremo a extremo y nunca encuentra el equilibrio.