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Argentina
3 de mayo de 2017
ENTREVISTAS LA TECLA

Luis María Ferella: "Vamos tras la corrupción, a pisar callos"

El titular de la flamante Oficina de Fortalecimiento Institucional brinda detalles de cómo funcionará el organismo. Los objetivos y las diferencias con la dependencia que lidera Laura Alonso

Luis María Ferella:
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“Luchamos contra las mafias afuera y adentro del Estado; prometo luchar contra la corrupción hasta el último día de mi mandato”, señaló María Eugenia Vidal al anunciar la puesta en marcha de la Oficina de Fortalecimiento Institucional (OFI), la cual está a cargo del doctor Luis María Ferella y depende del Ministerio de Justicia, que conduce Gustavo Ferrari.

Según se informó de manera oficial, el objetivo es que la OFI avance en la generación y promoción de un marco normativo en materia de transparencia, ética pública, conflicto de intereses y lucha contra la corrupción, que permita dar un marco institucional para prevenir y disuadir prácticas nocivas. Los detalles, a cargo del mencionado Ferella, mano a mano con La Tecla.

-La oficina empezó a funcionar unas horas después del anuncio. ¿Ya se recibieron denuncias?
-Sí, hemos recibido un par de presentaciones, que, por supuesto, todavía no se han podido analizar. Estamos en esa instancia. Cualquier denuncia que ingrese por el canal que tenemos habilitado, que es la web del Ministerio de Justicia, primero va a pasar por un proceso de admisibilidad que tiene como objetivo verificar si somos competentes o no; después empezaremos a analizar los extremos legales y la verosimilitud de los hechos que se alegan.

-¿Calculan cuántas de las denuncias que se hagan pueden ser reales y cuántas simples bromas u operaciones políticas?
-No, no hay un estimativo.

-¿Se van a analizar todos los casos?
-Sí, se va a verificar caso por caso. Estamos para eso. Y lo vamos a hacer con la seriedad y el profesionalismo que hay que hacerlo. Por eso es que cada denuncia va a llevar su tiempo. En algunas ocasiones nos vamos a ver en la necesidad de interactuar con el denunciante. Tal vez nos escriba y las cosas no nos queden del todo claras. Quizá se necesite un ida y vuelta a través de mails, para ampliar, por ejemplo. Es eso lo que estamos haciendo con las que entraron en las primeras horas.

-Si existe una denuncia relacionada con un abuso de autoridad, ¿también lo toman, o tiene que estar vinculado a un caso de corrupción?
-Vamos a tomar todas las denuncias relacionadas a hechos contrarios a la ética pública, y sobre corrupción. En el caso de que nos llegue una denuncia y no tengamos competencia, lo que tenemos que hacer es darle traslado a la Fiscalía de Estado. Estamos obligados como funcionarios públicos, según lo establece el Código Procesal.

-¿Cuál sería el objetivo principal de esta movida?
-Hoy, el objetivo principal es instalar la Oficina de Fortalecimiento Institucional como referente en materia de transparencia y prevención en la provincia de Buenos Aires. Con eso nos quedaríamos satisfechos, sería misión cumplida. La Provincia viene atrasada con respecto al mundo, que ya hace rato viene caminando en esa dirección, y acá no se había tomado un posicionamiento en ese sentido. Creemos que la decisión de la gobernadora Vidal y del ministro Ferrari de avanzar en esa dirección es la adecuada, más allá de los responsables de este organismo. Este el camino: apostar a la integridad, a la transparencia.

-Habla de la instalación de la oficina y no de resultados. Imagino que también apostarán a eso.
-Sí, claro. Pero el primer paso es la instalación, porque nos tienen que referenciar. Es un trabajo de largo plazo.
A la brevedad no vamos a solucionar nada, pero sí, como dice la Gobernadora, empezamos a hacer lo que hay que hacer. Empezamos. Y la idea es que la oficina crezca y se haga fuerte. Estamos seguros de que en adelante va a ser muy difícil que alguien quiera venir a plantear su eliminación. Hay que trabajar en este tipo de políticas públicas; no sólo este gobierno, todos los gobiernos. Nos apartamos un poco del estilo clásico de la Oficina Anticorrupción, que tiene un enfoque punitivo; nosotros nos abocamos fundamentalmente a la prevención. Por eso hablamos de fortalecimiento institucional, por eso no nos llamamos Oficina o Agencia Anticorrupción.

-Cuando habla de “prevención”, ¿sería una especie de “ojo, que acá estamos”?
-Ojo, que acá estamos; ojo, que controlamos; queremos transparentar, queremos que ustedes (los empleados estatales) vean lo que sucede y que sean el primer control. Por ejemplo, en lo relativo a las DDJJ, el primer control es el ciudadano, que las va a poder visualizar a través de su computadora. Son muchos los ciudadanos que conocen a los funcionarios bonaerenses, que saben qué tienen en realidad y qué dicen que tienen. Es el primer control. El segundo es el que vamos a hacer nosotros sobre todas las declaraciones juradas. Al margen de las denuncias, vamos a hacer un análisis a través de una muestra. Le puede tocar a cualquiera. Sobre esa muestra vamos a hacer cruzamiento de datos como para ver la
consistencia o no de esa declaración.

-¿Algún ejemplo de esos aportes?
-Por ejemplo, la Oficina Anticorrupción jujeña ha tenido una participación trascendente en el caso de Milagro Sala.

-¿A qué se refiere cuando dice que los resultados se verán a largo plazo?
-Creemos que se van a ver resultados antes de diciembre de 2019. El tema de las declaraciones juradas es a corto plazo. Nuestro control va a estar visible con celeridad. Además vamos a trabajar en un mapa de transparencia en todos los ministerios, que después lo vamos a ampliar a toda la administración. Esto va a llevar unos meses de trabajo. La idea es trabajar individualmente con los ministerios y las secretarías para tratar de focalizar dónde están los posibles problemas o debilidades y ver qué soluciones tenemos para cada una de las situaciones, quizá dando recomendaciones o con leves correcciones.

-¿Hay corrupción en la provincia de Buenos Aires?
-Debe de haber. La Gobernadora dice que hay corrupción y que hay que combatirla. Estamos acá para prevenir, para trabajar en la transparencia. La Provin-cia es muy grande, y nadie puede asegurar que no haya nichos de corrupción.
De hecho, han aparecido algunas cuestiones vinculadas a la gestión anterior que la Justicia está investigando. A priori prevalece el principio de inocencia, pero hubo situaciones, por lo menos, llamativas.

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